Pelar, lavar y cortar en trozos grandes la patata, la cebolleta y los calabacines. Si los alimentos son ecológicos no es necesario pelarlos ya que la piel mantiene intactas y limpias sus propiedades y vitaminas y esto es beneficioso para el organismo.
En una sartén echar la cucharadita de aceite de oliva virgen y sofreír los trozos que acabamos de cortar durante unos minutos. Añadir la leche de soja y completar con agua hasta que el líquido cubra los calabacines. Seguir cociendo a fuego medio hasta que los ingredientes se hayan ablandado. Salpimentar al gusto.
Sacar todos los ingredientes de la sartén y pasarlos por la batidora. La cremosidad de la mezcla se puede ir corrigiendo añadiendo poco a poco más leche de soja, sólo si es necesario. Dejar reposar y servir a temperatura ambiente. Se puede adornar la crema con cuadraditos de calabaza y de calabacín. Como toque final, espolvorear con un poco de nuez moscada por encima.